Cuando éramos novios con mi prometido pasé una etapa de autodescubrimiento donde cuando tenía una pelea con mi él, me enojaba y me resentía.
Yo pensaba así: “Si me resiento lo suficiente él va deshacer el mal entendido que tuvimos, por que él tuvo la culpa”.
¿Qué aprendí?
Aprendí que cuando estoy resentida no puedo sentir nada más, no siento felicidad, no siento gratitud, sino que me encierro en la caja de resentimiento y me vuelvo terca. Terca al no ver mi parte de responsabilidad en lo que hago y no perdonar.
Cuando estás resentida tu no:
- Disfrutas la vida
- Ves las oportunidades que tienes de aprender de tí misma
- Perdonas
- Tú calidad de vida disminuye mucho
Yo se que tú como yo queremos vivir bien y felices, así que, ¿porqué nos resentimos?
- Él no me trata bien, ¿por qué estas con él realmente?
- Querías decir que no querías ir a TAL lugar pero por temor al rechazo dijiste sí, ¿porqué no comunicas lo que realmente quieres?
- Por qué si lo tengo que pedir ya no lo quiero, ¿por qué no comunicas tus necesidades con claridad? Nadie puede leerte la mente.
- Porque si no hago berrinche nadie me presta atención, ¿porque no trabajas en tu valor personal y amarte a ti como eres?
Cómo ves, el resentimiento solo refleja una parte de tí que no has cuidado. Descubre lo que necesitas platicando contigo misma con compasión y ternura. Descubre lo que te duele y sánate. Que nadie pueda jugar con tus sentimientos, más que tú. Tú diriges tu vida y tú decides si te enfocas en lo que te hace feliz o lo que te resiente.
La próxima vez que sientas resentimiento, pregúntate así:
- ¿Qué siento ahora?
- ¿Qué puedo aprender de mi misma ahora?
- Dí: “Me perdono por pensar y sentir resentimiento, escojo ver amor en lugar de odio y miedo”.
- Enfócate en algo de lo que estés agradecida. Haz una lista de 10 cosas que agradeces de tu vida. (tu cama, tu inteligencia, tu casa, tu familia…)
Prioriza tu felicidad,
Kiriosa.
