Te pasa que tu pareja, tu amiga, tu familiar, se enojan por algo que les pasó, te cuentan lo que les pasó y TÚ TERMINAS ENOJADA.
Como si absorbieras sus emociones y sus problemas se convirtieran en tus problemas.
Hablemos claro, tú quieres mucho a tus seres queridos y deseas lo mejor para ellos, pero sus problemas no son tus problemas. Y cuando conviertes sus problemas en los tuyos no puedes brindar una solución, solo estás enojada.
¿Qué hacer?
- Antes de enojarte: Pon límites. Tu tienes la responsabilidad de tus emociones y cómo reaccionas. Los límites suenan como:
-”Sé que estás molesta y quieres hablar pero hoy tuve un día muy difícil y quiero descansar, ¿podemos hablar mañana?”
-”Te quiero mucho, tú eres muy importante para mí, pero ahora no quiero hablar de lo que te paso”.
-”Entiendo que lo que te paso es injusto y yo quiero lo mejor para tí, pero no quiero tomar responsabilidad de tus problemas como míos”.
“A ojo de buen cubero” puedes ver que los ejemplos de límites empiezan con una frase que reconoce el dolor emocional de la otra persona y después explicas tu necesidad.
- Ya estás enojada: Date cuenta cómo estás reaccionando, enojo, culpas a otros, decepción, rabia, ¿Cómo te sientes? Explicate a tí misma que sientes y en qué parte de tu cuerpo lo sientes. Replanteate las cosas. Lo único que tienes que hacer es QUERER SENTIRTE MEJOR Y CELEBRA QUE TE QUIERES SENTIR MEJOR.
- Cuando ya se te pasó: Agradece. Haz una lista de 10 cosas de las cuales estas agradecida y siente esa gratitud en tu cuerpo físicamente.
Este proceso es simple, pero puede volverse complicado por nuestras emociones fuera de control. Es aquí donde la disciplina de tus pensamientos en muy importante. Por eso la meditación es importante, porque nos ayuda a escoger mejor nuestros pensamientos y distinguirlos. Nosotras no somos lo que pensamos, por eso podemos escoger lo que queremos pensar. Recuerda que lo que piensas se convierte en emociones y las emociones en acciones.
Escríbeme en los comentarios, ¿Cómo te fué al probar este método?
Prioriza tu felicidad,
Kiriosa.
Muy buenos tips a ponerlos en practica